viernes, 29 de junio de 2012

SERES INTEGRALES, TOTALES, QUE ABRAZAN TODOS LOS ASPECTOS DE LA REALIDAD.

Son muchas las dimensiones del ser humano, todas componen el rico abanico de su manifestación y cada una cumple su función, aportándonos entre todas ellas la riqueza que es la expresión de la humanidad con sus contrastes, reflejos y referentes. Gracias a nuestro vivir y expresar conocemos aquello que nos falta por no estar suficientemente desarrollado o aquello de lo que tenemos excedente.

Constantemente a través de nuestros miedos, deseos, reacciones, huidas y atracciones vamos descubriendo aquello de nosotros que tenemos que integrar, sanar, amar, superar o trascender. Es esta la única forma que tenemos de crecer y evolucionar. El hombre y la mujer real lo experimenta todo y de todo saca su lección correspondiente, como consecuencia se vuelve más comprensivo y abierto hacia los demás sea cual sea su condición.

Todo lo que vemos y también lo que no vemos de los demás está de un modo u otro en nosotros. El ladrón, el asesino, la prostituta, el vengativo, el vanidoso, todas las formas de conducta que detestamos están agazapadas en alguna parte de nosotros, también las más admiradas por su nobleza, sabiduría, belleza, bondad, santidad y divinidad.

Todo el espectro de la realidad es el espectro de la realidad de nuestro ser. Por eso es tan bueno que nos perdonemos siempre y siempre perdonemos a los demás, por eso es tan deseable que no nos rasguemos las vestiduras cada vez que vemos surgir en nosotros alguna de esas facetas que consideramos reprobables y poco ideales.

Tan error es ir de buenos como de malvados, de sabios como de ignorantes, pues de todo tenemos un poco. Y aquel que esté limpio de culpa o de cualquier faceta de las múltiples que componen la realidad que tire la primera piedra, suena, ¿verdad?, pues eso.

TODO ESTÁ INTERCONECTADO. TODOS ESTAMOS UNIDOS. NADA HAY QUE NOS SEA AJENO.



Los minerales y las plantas, los animales y los seres humanos, todos estamos interconectados, también el pasado y el futuro, los hombres y mujeres de las cavernas y los seres de otros mundos y galaxias, el mundo físico y el espiritual, los seres de niveles más densos y menos evolucionados y los seres divinos, aquellos a los que podemos llamar dioses.

 Podemos sintonizarnos con cualquiera de esos niveles y seres, porque todos ellos de una manera u otra están en nosotros, junto a nosotros, formando parte de nosotros.

La mente y el corazón, pero sobre todo este último, son las puertas que dan acceso a todas las realidades existentes. Hay mucha luz con la que conectar, mucho amor al que acceder, muchos niveles de la realidad
que nos aúpan al infinito potencial que somos.

Es importante que veamos la banda de frecuencia dentro de la cual funcionamos y nos movemos, pero también saber que el dial nos puede conducir a las franjas más elevadas, gozosas y bellas de cuanto es posible y que está contenido dentro de la infinita Realidad que nos acoge.

Reconoce que en ti se halla el mineral y el vegetal, la piedra y el ángel, la sombra y la luz, el hombre o la mujer desorientados pero también el dios y la diosa. Sabe que esto es así y abre el vuelo hacia lo más grande y bello de tus posibilidades.

CREAMOS CONSTANTEMENTE NUESTRA REALIDAD. LA MENTE ES EL INSTRUMENTO PARA ELLO. VIVIMOS SEGÚN SON NUESTROS PENSAMIENTOS. EL PODER PARA CAMBIARLOS ESTÁ EN NOSOTROS, PORQUE SOMOS MÁS QUE LA MENTE. SOMOS LA FUENTE DESDE LA CUAL CREAR.



Los seres humanos somos creadores de realidad y nuestra mente es el instrumento con el que contamos para ello. Nuestras vidas pueden ser gozosas, amorosas, dichosas, llenas de paz y armonía o , por el contrario verdaderos infiernos y lugares de sufrimiento.

El problema que tenemos es que hemos olvidado que el poder creador para que esto sea así y tome un cariz u otro está en nosotros, tanto es así que, en nuestra ignorancia, hemos transferido dicho poder y capacidad a infinidad de poderes sucedáneos, todos externos a nosotros mismos, personas, cosas, situaciones...Por eso vivimos a expensas de casi todo, de la cara o aspecto de nuestro jefe, de si es lunes o viernes, de cómo se encuentra la bolsa, de la situación financiera, del carácter de nuestros vecinos, de si nos dicen tal o cual palabra, etc. Esta es la raíz de la verdadera esclavitud, la peor de todas, el origen de cualquier crisis, que es la interior.

Nuestros pensamientos son los que configuran la realidad que luego vivimos, atraemos y experimentamos; así de claro. Nuestro modo de pensar condiciona absolutamente todo nuestro mundo. Esta es una de las claves de la felicidad. La otra, es que tenemos la capacidad para orientar nuestra mente, ya que es un instrumento a nuestro servicio, porque somos más que la mente. Pero lo más definitivo es que nuestro ser es un potencial infinito que contiene, que es, todo aquello a lo que podamos aspirar de lo más bello, más grande, más grato y total que nos acerca o que es la plenitud misma.

Si te abres a tu ser y reconoces en él la Fuente de todo aquello a lo que aspiras, si reconoces en él el origen de tu verdadera felicidad, sabiduría, energía, conciencia y poder, entonces tu mente se transformará y estará a tu servicio, al servicio del mundo que tu quieres crear, y entonces verás como poco a poco todo se transforma a tu alrededor.

Afírmate, pues, previamente para ello como una Fuente de felicidad y de gozo, de inteligencia y sabiduría, de paz y armonía, de plenitud y prosperidad, de amor y energía. Y vive después desde este convencimiento.

miércoles, 27 de junio de 2012

PIRAOS, IRREALES E ILUMINADOS BAJO LA CAPA DE ESPIRITUALIDAD.


En el mundo de los caminos o vías espirituales hay de todo. Yo he visto gente de muchas clases. He tenido la suerte de conocer y estar con verdaderos sabios, santos, Maestros y  seres Despiertos, pero he visto también a gente pirada, irreal e "iluminados" (más bien chamuscados) con capa de espiritualidad.

Los primeros te transforman y te conducen al corazón de la Alegría, la Paz, el Amor, la Sabiduría y el Hacer creativo y servicial, te llevan siempre de lo irreal a Lo Real, de la oscuridad a la Luz, de la ignorancia a la Conciencia, mientras que los segundos, además de ser profundamente egoístas y estar la mayoría de ellos llenos de líos personales y situaciones no resueltas, lo único que siembran a su alrededor es confusión y más lío todavía, suelen ser apocalípticos, ven el mal por todas partes (el que no han resuelto en ellos mismos) y por si fuera poco carecen del más elemental sentido común.

Son personas que se han subido a la azotea de la espiritualidad o mejor dicho de una pretendida espiritualidad sin haber pasado por ninguno de los pisos previos, es decir no han madurado ni a nivel emocional, ni afectivo, ni mental; de ahí todo su desastre y confusión que esconden detrás del sufrido parapeto de la espiritualidad. Huyen de todo cuanto signifique poner conciencia y luz  en sus vidas. Su peor enemigo es el "darse cuenta" de lo que les está pasando, por eso no quieren entrar ni profundizar en sus vidas para descubrir y comprender sus nudos, parálisis, carencias, miedos y sufrimientos.




LA EXPERIENCIA ESPIRITUAL NO ES UNA FANTASÍA. LA VERDADERA ESPIRITUALIDAD ES EL RESULTADO DE LA MANIFESTACIÓN DE LA REALIDAD SUPREMA.


  La comprensión espiritual de la existencia no tiene nada que ver con una ideología, ni siquiera es una forma de pensar más, es el resultado lógico y natural del desarrollo evolutivo del ser humano. El ser espiritual se corresponde por lo tanto con un nivel del crecimiento humano que trasciende aunque integrándolos todos los pasos y aspectos anteriores de nuestro crecimiento.

Con la mente llegamos a un tope en nuestro desarrollo, ella nos deja a las puertas del siguiente paso evolutivo que se corresponde con la apertura y la presencia consciente en nosotros del espíritu. Cuando nos abrimos a esa realidad espiritual y trascendente, aunque inmanente en todo, nuestra vida se transforma radicalmente en la medida en que asumimos nuestra identidad espiritual, nuestra condición de almas, de seres espirituales.

 La realidad espiritual no tiene nada que ver con una exclusión ni huida de la vida, todo lo contrario, nos lleva a una profundización radical de la misma, de la que adquirimos entonces su verdadera dimensión y sentido.

El ser espiritual real ha integrado todos los pasos y tramos previos de su crecimiento, los ha abrazado todos y a todos les ha dado su verdadero valor, ni más ni menos. El verdadero ser espiritual abraza los dos aspectos de la realidad, el de la luz y el de la sombra, el del subconsciente y el de la supraconsciencia. El resultado es el surgimiento del verdadero Amor, de la auténtica Sabiduría y de la Acción correcta y creativa.
Aquel que ha despertado a su ser espiritual se convierte en un servidor planetario allá donde se encuentre y con los medios, cualidades y posibilidades que tiene, sea en la cocina, sea cuidando a su bebé, sea en el aula dando clases, en una oficina, en el campo, en la vida política o en un monasterio, donde sea.

martes, 26 de junio de 2012

PERSONAS REALES VERSUS PERSONAS FANTASIOSAS E IRREALES. QUIEN VIVE EN UN "GLOBO" NO CRECE.


El primer paso para empezar a crecer es ser personas reales, partir del punto de verdad en el que cada uno se encuentra. Hay personas que por miedo a encontrarse con su mundo interior se han cargado de corazas y de defensas. Estas personas son inaccesibles, no hay posibilidad de entrar en ellas y por eso es muy difícil empezar con ellas un verdadero trabajo de crecimiento espiritual. Repelen de mil maneras cuanto les pueda llevar a reconocer su propia realidad. De tantos miedos que tienen no reconocen ni se permiten sentir ninguno. En el fondo lo que tienen es un profundo dolor que no han dejado aflorar. Y para evitarlo viven en un constante globo, en una irrealidad construida con fantasías. Si por casualidad se acercan a algún camino de crecimiento nunca será a aquel que les exija un trabajo de autoconocimiento o de desarrollo de la conciencia que les permita desvelar sus mentiras y en definitiva su "sombra", si acaso se acercan a personas y vías que lo que hacen es promover o fijarse en poderes extraños, misteriosos y "ocultos" a los cuales de un modo o de otro  siguen, porque no les interesa el poder que nace del contacto con su verdadero ser sino el que se sitúa siempre fuera, en el exterior, en algo o en alguien (sea extraterrestre, contacto con alguna entidad extraña...) que es quien les salvará o les dirá lo maravillosos que son o que son elegidos para algo. Las personas que así se mueven son eternos niños que difícilmente crecen, viven en sus propias fantasías e idealizaciones que proyectan con mucha facilidad sobre los demás.

Lo contrario de la persona irreal y fantasiosa es la persona real, aquella que ha entrado en contacto con su propio dolor, la que conoce sus verdaderos sentimientos, sus emociones, la que tiene identificados de un modo o de otro sus miedos, sus verdaderos deseo y sus frustraciones; la persona real conoce más o menos sus verdaderos problemas y se da cuenta de cual es la responsabilidad que tiene en ellos, tiene conectada su mente, su corazón y sus acciones. Su hablar es claro y no hueco, cercano, real. La persona real es accesible cuando inicia un camino de crecimiento interior, conoce sus brechas y reconoce sus corazas y resistencias, sus trampas y sus mentiras.

Volverse una persona real es el primer paso para cualquier vía de crecimiento interior y por supuesto para abrirse al mundo y a la realidad espiritual. Pero esto requiere humildad, entrega, confianza, sinceridad, honradez y amor a la verdad, que son las condiciones imprescindibles y necesarias para avanzar en el desarrollo de la conciencia y del conocimiento. A la Luz sólo se llega cuando se ha transitado por la oscuridad y se la ha abrazado, no negado. Lo más opuesto a cualquier forma de Despertar es la irrealidad.


TU ALMA NO ES UNA IDEA, NO ES UN CONCEPTO, NO ES EL FRUTO DE UN MITO, TAMPOCO ES UNA FANTASÍA. NUESTRA ALMA ES LA DIMENSIÓN MÁS REAL DE NOSOTROS MISMOS. CUANDO EMPEZAMOS A VIVENCIARNOS COMO ALMAS EXPERIMENTAMOS LA PRESENCIA SÓLIDA, CÁLIDA Y SUTIL DE NUESTRO SER, Y TODO ATISBO DE SOLEDAD DESAPARECE.


viernes, 22 de junio de 2012

MÁS ALLÁ DE LA APARIENCIA DE REALIDAD. El DESPERTAR A NUESTRA VERDADERA IDENTIDAD.


Todo en la vida, más pronto o más tarde, nos impulsa a ir más allá de los sentidos, más allá de las formas, más allá de los pensamientos, más allá de la propia mente, más allá de la personalidad, más allá de cualquier idea o imagen que nos podamos hacer de nosotros mismos, más allá de este mundo, más allá de este universo y más allá de la materia y, por supuesto de la muerte.

Todo nos incita y nos moviliza, más pronto o más tarde, a ir más allá de cualquier clase de apariencia, de la misma apariencia de realidad, porque una como Presencia más profunda y plena, inmutable, íntima, potente y familiar, nos atrae desde lo más dentro y fuera de nosotros mismos hasta vernos y sentirnos totalmente envueltos, inmersos, respirando en esa clase de imán sin cuya atracción no seríamos y con cuya llamada nuestra vida se vuelve luminosa, pura alegría de ser, totalidad con sentido dentro de la Totalidad en la que todo y todos los demás se integran.

En definitiva, estamos hablando del despertar a la Presencia del Espíritu en nosotros y de nosotros en él, se trata de un despertar a nuestra verdadera identidad.

miércoles, 20 de junio de 2012

LA VIDA VISTA DESDE EL EGO NO ES LO MISMO QUE SI SE CONTEMPLA DESDE EL PLAN DE NUESTRA ALMA. IMPORTA QUE DESCUBRAMOS AL SERVICIO DE CUAL DE LOS DOS ESTAMOS.



La vida vista desde el ego se interpreta de una manera, pero contemplada desde la óptica de la evolución y el plan de nuestra alma se comprende de forma diferente.

Las luchas, desvelos y esfuerzos del ego sólo buscan apuntalarse a sí mismo, son egoístas, aunque a veces se disfracen de otra cosa distinta como la bondad o las buenas intenciones.

Cuando descubrimos el plan de nuestra alma, entonces nos damos cuenta de la cantidad de energía que hemos perdido en nuestra vida en acciones, aventuras y proyectos totalmente vanos que no tenían en el fondo otro fin que el de alimentar nuestra vanidad e importancia personal, y de los cuales normalmente lo que extremos es sufrimiento y sensación de vacío.

Cuando hemos descubierto cual es la finalidad real de nuestra vida y para lo cual nuestra alma quiso nacer, entonces la perspectiva de nuestra existencia cambia, quitamos el foco de nuestro vivir de ciertas pretensiones y nos empezamos a concentrar en otras muy diferentes, normalmente de servicio, humildad, paciencia, comprensión, interés por los demás, autoconocimiento, apertura y entrega a Lo Superior, etc.

Lo que son triunfos para nuestro ego suelen ser fracasos para nuestra alma y viceversa. Al final lo que de verdad cuenta es si hemos sido fieles o no al propósito que nos trajo a este mundo. Nuestro corazón sabe mucho de esto; nuestra cabeza suele estar llena de pájaros. Nuestro corazón no miente, nuestra cabeza sí.

martes, 19 de junio de 2012

VIVIMOS DESORIENTADOS MIENTRAS NO ENTENDEMOS LO QUE NOS ESTÁ PASANDO. Al no conocer el guión de nuestra vida no comprendemos lo que nos pasa, al no haber descubierto de donde venimos no sabemos para qué estamos aquí. Como no sabemos el papel que los demás tienen en nuestra obra vivimos detestando, rechazando y renegando. Existe una lógica implícita en nuestra vida, un significado que va más allá incluso de lo que consideramos como justo o injusto, lo que me gusta y lo que me desagrada, lo que considero bueno y lo que considero malo. El Significado de lo que vivimos tiene que ver con el plan de nuestra alma y está relacionado con el plan de todas las demás almas con las que interactuamos. El Plan de nuestra alma se llama Evolución, Desarrollo de nuestro potencial infinito, Soltar toda nuestra ignorancia, Alcanzar la conciencia de unidad, Corresponsabilidad con el crecimiento, desarrollo y evolución de todos los demás, Despertar a nuestra verdadera Identidad, Realizar en nosotros la conciencia de inmortalidad, Participar en la creación y desarrollo de formas de existencia, mundos y universos. Ser la expresión completa de Lo divino en nosotros y a través de nosotros.


LA REALIDAD ESPIRITUAL O MUNDO DEL ESPÍRITU ES INCLUSO MÁS REAL QUE ESTA QUE TENEMOS POR TAL. Los actores en el teatro o en el cine, mientras actúan no olvidan el mundo real del cual provienen, y distinguen claramente entre la realidad de la obra dentro de la cual están interpretando y su verdadero mundo personal. Nosotros hemos olvidado nuestro origen y hemos llegado a creer que nuestro medio cuerpo-mundo-materia es nuestra única realidad. Tenemos que recordar, tenemos que despertar a nuestra verdadera identidad, si no es así no comprenderemos nada de lo que estamos viviendo, ni su significado, ni su sentido. Recordar, despertar, abrir los ojos del alma estas son las claves del futuro de la humanidad.


SOMOS ALMAS, SERES ESPIRITUALES que tenemos un cuerpo y que nos movemos en dimensiones materiales de la realidad que previamente hemos creado. Nuestra forma no es la forma de este cuerpo que tenemos, ni nuestra personalidad se limita a esta personalidad que ahora manifestamos. Somos más que una personalidad concreta, incluso más que este sexo que ahora tenemos. Somos "focos" o "centros" individuales de conciencia, con voluntad, amor e inteligencia propios. Somos realidades vivas, individuales y conscientes creciendo, evolucionando, desarrollando, y creando a través de mundos y universos. Nuestra conciencia-alma es el centro radical de nuestra identidad. El peor error es confundirnos con todo lo que no somos. Nuestro cuerpo es un instrumento, un medio, sólo eso, y este mundo es el escenario donde ser, aprender y crear.


miércoles, 13 de junio de 2012

REGRESA UNA Y OTRA VEZ A TU CONCIENCIA DE SER, al corazón de tu mandala interior en donde reina la pura armonía de la Presencia. Renace en tu Ser, no eres ni nunca fuiste ni serás ninguna de las contingencias de tu ego. Bebe de la Fuente que emana de tu corazón y deja que esa Agua riegue todos los "campos" por donde pases.


SUBE EL NIVEL DE TU CONCIENCIA, abre y eleva tu percepción interior, que la luz de tu ser diluya la densidad de tus temores, ansiedades, frustraciones, quejas y líos del ego. Que cualquier clase de sufrimiento se disuelva como azucarillo en el mar gozoso de la Conciencia Radiante en la que eres. Expande tu corazón y deja también sentir en él la Presencia de los grandes, sabios y santos seres que viven en la Conciencia de Lo Divino. Que la Luz de lo alto te inunde, que seas uno con ella.


TODOS TENEMOS UNA TAREA IRRENUNCIABLE QUE REALIZAR EN ESTA VIDA, algo fundamental que nadie puede resolver o hacer por nosotros, algo que si no lo hacemos nos volverá continuamente una y otra vez hasta que cumplamos con nuestra tarea. Saber cual es el compromiso más importante que hemos adquirido voluntariamente para esta vida hace que comprendamos muchas de las cosas que vivimos y nos pasan. Hemos venido a la Tierra con unas lecciones muy concretas que aprender y desarrollar. Que al final de nuestros dias aquí podamos decir con alegría y satisfacción aquello de: "misión cumplida".


martes, 12 de junio de 2012



                                NUESTRAS MENTES COLOREAN LA REALIDAD, pero nosotros no somos nuestra mente. Puede que hoy una discusión, un lío de los que a menudo se forman en nuestras vidas nos saque de nosotros mismos hasta convertirnos aparentemente en ese lío. Pero no somos ni nuestro lío ni nuestra mente. Muchas veces nos ha pasado que por un tiempo cabalgamos a merced de nuestros pensamientos, que no siempre son lo agradables que quisiéramos, a veces a través de ellos se nos va nuestra energía, y nos agotamos. Todo es un problema de nuestra mente. Verla, ver sus pensamientos, ver los líos, ver todo eso y darnos cuenta de que nosotros somos el observador que ve es la puerta que abre la cárcel de la mente. Y si nos mantenemos atentos a nuestro ver pronto nos se sentiremos otra vez en la calidez gozosa de nuestro ser, sin líos, sin pensamientos, sin mente, en contacto con el manantial de nuestra felicidad.

EXISTIMOS AQUÍ Y AHORA y esta es nuestra tarea, la tarea de Ser. En el corazón del Misterio nos encontramos. Siempre allí, dondequiera que sea nos reconoceremos, en nuestra esencia, conscientes de ser, vivos. Hemos estado en muchos mundos y universos desde que nacimos a la consciencia como un acto de Amor de Lo Divino. Desde entonces nuestro existir eterno consiste en un vivir, crear y manifestar el infinito potencial de nuestro Origen. Somos una sonrisa, una caricia, un acto creador de Dios mismo.