ESPIRITUALIDAD, EVOLUCIÓN, CONCIENCIA, DIOS
sábado, 12 de mayo de 2012
Una silla vacía, y el Ser libre, sin apoyos. Una amanecer o un atardecer no son más que una fracción en el tiempo. La Luz que eres contempla ambos extremos y sobre ellos se balancea, placidamente, eternamente.
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